En la sinfonía escuchada en clase se muestra la obra creada por Maurice Ravel, llamada “Bolero”.
Esta grandiosa obra, inicia soltando melodías con mensajes misteriosos. Se puede percibir, un misterio, el cual te obliga a prestar una mayor atención para conocer el desenlace. Estos sonidos van mutando y cambiando de color, transformándose, cada vez, en más intensos. Se transforman en alegres, entretenidos, misteriosos, y bellos. Todo se intensifica cada vez más y más, con mayor fuerza, llegando a un punto explosivo. La obra, nunca deja de perder su esencia misteriosa y de carácter positivo.
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